Chicken Little
Chicken Little no es más que un intento de la Disney de hacer una película de animación 3D «de moda», es decir, una comedia alocada con toques absurdos, y además pasada por el filtro de la inevitable moralina de la casa.
Tras regalarnos dos joyas como son «Los Gatos no Bailan» y sobre todo, «El Emperador y sus Locuras», Mark Dindal se vende completamente a la típica fórmula prefabricada de «hijo metepatas se siente frustrado porque su padre no confía en él pero al final sí». Y todo ello con una serie de personajes en general carentes de gracia, pero al menos con cierta calidez. Esto también es aplicable a la “Robots” de Chris Wedge, pero en este caso los personajes ni siquiera resultaban cálidos.
La historia intenta ser un ¿homenaje? A la ciencia ficción de los años 50, con evocaciones a la Guerra de los Mundos y demás, pero el desenlace es tan sumamente infantil y tan cogido por los pelos que marca directamente la fecha de caducidad de esta película.
Los puntos a favor, la animación, muy cartoon y muy fresca. Disney va por buen camino técnicamente en el 3D. También a destacar el diseño de producción y el de personajes, en el que trabajó Joe Moshier, al que también le debemos los diseños de personajes de “El Emperador y sus Locuras” y “Zafarrancho en el Rancho”. El score de John Debney también está bastante bien.
Miedo me dan ahora American Dog y Rapunzel de Disney, espero que cambien la onda y que nos sorprendan películas diferentes y con encanto, como fueron en su día “El Emperador y sus Locuras” o “Lilo y Stitch”.
I’ve seen Chicken Little at last. I was afraid about it after reading some critics… but they all were right…
Chicken Little is not more than a Disney effort of making a cool and succesful 3D animation film, that’s it, a looney comedy, quite absurd and with the typical ethic Disney touch.
Alter making two gems like “Cats Don’t Dance” and specially “The Emperor’s New Groove”, Mark Dindal falls completely into the typical formula of “nerd son whose father doesn’t trust him, but at the end he does”. And all of this told with a pack of not very funny but quite warm characters. We can apply the same for Chris Wedge’s “Robots”, but in that case the characters weren’t warm at all.
The plot tries to be an ¿homage” to 50’s science fiction, reminding “War of the Worlds”, but the ending is so childish and casual that makes the movie to be forgetable.
The good points, the animation, very fresh and cartoony. Disney is doing OK in 3D animation, production and character design, by Joe Moshier, who also worked in “The Emperor’s New Groove” and “Home on the Range”. The score, by John Debney is quite good as well.
I’m afraid now about “American Dog” and “Rapunzel”, both by Disney. I hope they change their groove and make different and charming movies as “The Emperor’s New Groove” and “Lilo & Stitch”.
Kirikú y las Bestias Salvajes
La Novia Cadáver
Se trata de una película burtoniana de principio a fin, sobre todo en lo que a estética y tema se refiere, aunque la sombra de Pesadilla Antes de Navidad es alrgada, y en mi opinión la Novia Cadáver se resiente de ello.
El guión me encantó, pero no está demasiado tratado en profunidad, sobre todo en algunos personajes como Víctor, que realmente no sabes cuáles son sus motivaciones. Llegas a pensar que le da igual una cosa que otra. Es una película corta, que se te pasa en un suspiro, y casi parece que hayas visto un corto en lugar de un largometraje. La inclusión de números musicales sigue la estela de Pesadilla Antes de Navidad, aunque no son tan logrados ni las canciones tan buenas. La canción de los esqueletos se parece mucho a la canción de Oogie Boogie. Hay planos y momentos geniales, como el travelling de los créditos, la aparición de la novia en el bosque y el momento que más me gustó: Víctor y la novia cadáver tocando el piano juntos.
Los mayores logros y donde reside el encanto de esta película es en el diseño de producción, que vuelve a llegar a niveles de escándalo. Los diseños de personajes, TODOS, repito, TODOS son maravillosos, desde la novia cadáver (el personaje más logrado, por cierto), hasta los invitados a la boda, pasando por el mayordomo, los padres de los protagonistas, el cura (que gran diseño!!). Aunque mi favorito fue Elder Gutknecht, el esqueleto anciano. El diseño de Víctor es un calco de Johnny Depp, sobre todo en la mirada y en las comisuras de los labios, un detalle que aporta mucho. Hay que decir que la labor de Carlos Grangel como diseñador de personajes se reconoce en los créditos principales.
El tratamiento del color es prácticamente blanco y negro en el mundo de los vivos, mientras que para la cantina del mundo de los muertos aparece una gran variedad cromática, con luces de neón incluso. Es un curioso contraste, ya que la historia refleja una sociedad fría y gris como la victoriana.
Mención aparte la banda sonora de Danny Elfman, que aunque las canciones no llegaron a emocionarme, el score es precioso, sobre todo el tema de la novia.
No falta en esta peli el inevitable homenaje a Harruhausen, esta vez como marca del piano que toca Víctor en casa de los Everglot. Y hay detalles muy graciosos, como la parodia de Lo que el Viento se Llevó.
En resumen, una película visualmente impecable, con una historia macabra pero bonita, con la muerte como tema principal pero de la que esperaba algo más.
Últimas adquisiciones
Los Increíbles
Nueva y espectacular muestra de lo que la gente de Pixar es capaz de hacer. Un peliculón dirigido por Brad Bird, artífice de esa maravilla llamada el Gigante de Hierro. Los Increíbles cuenta la historia de una familia de superhéroes que debido a avtares del gobierno se ve obligada a vivir bajo la apariencia de una familia normal. Al margen de la perfección técnica de la película, lo mejor es el guión y los personajes, alcanzando unas cotas de definición insospechadas, con unos diálogos adultos y gracias a dios, sin demasiadas concesiones al público infantil.
La edición consta de dos discos, el segundo lleno lleno de cosas interesantes, especialmente las escenas eliminadas y los archivos de la ANS, donde cuentan la historia de muchos superhéroes que se mencionan de pasada en la película.
Tokyo Godfathers
Tokyo Godfathers cuenta la historia de 3 vagabundos, Gin, Miyuki (una adolescente) y la Srta. Hana (un travesti) que se encuentran un bebé en la basura el día de Navidad y lo recogen. Entonces deciden devolvérselo a sus padres. La peli nos habla de 3 personajes estupendos con una historia que contar y con un pasado con el que se reencuentran en una noche. Es una historia de encuentros y de buenos sentimientos contada con maestría narrativa y con un fino sentido del humor. Técnicamente es impresionante: el nivel de detalle y realismo de los fondos alcanza cotas insospechadas, y hay planos en 3D con una integración perfecta. La animación de personajes es muy natural, un brillante ejemplo de anatomía humana en movimiento y una nueva lección de estética del color. Las expresiones esta vez tiran más a la comedia, pero están totalmente justificadas.
Dirigida por Satoshi Kon (director de las no menos recomendables Perfect Blue y Millennium Actress), Tokyo Godfather es para mí una de las mejores películas de animación que he visto. La edición española no le hace justicia, pero por 9 € que cuesta en Fnac merece la pena.
Robots
La mala compra. Tuve el gran error de comprarla a ciegas guiándome por Ice Age. La Edad de Hielo, que había sido el anterior trabajo de la gente de Blue Sky Studios. Robots se hace más pretenciosa que Ice Age, más vendida a una fórmula prefabricada y con mucha menos gracia que su predecesora. Por lo menos es buena técnicamente, y destaca el diseño de producción, así como alguna que otra gracieta. Por cierto, lamentable el doblaje de Elsa Pataky y Alejo Sauras.
Lilo y Stitch (Edición Especial)
Sin duda, el mejor Disney moderno junto con El Emperador y Sus Locuras . Lilo y Stitch sigue con la línea que Disney está tomando últimamente de hacer películas diferentes, experimentando diferentes estilos y enfoques como El Emperador y sus Locuras, Atlantis, El Planeta del Tesoro… Y eso es algo de agradecer, porque si bien se puede echar en falta el clasicismo perfecto de películas como la Sirenita, su carácter de rareza la convierte en una joya para los aficionados y una peli perfecta para niños. En esta película, a pesar de lo surrealista a priori de la historia, se nota que quienes la han hecho se la han tomado muy en serio, y prueba de ello es que está filmada y narrada como si fuera un film de acción real. El meter música de Elvis de fondo para algunas secuencias es un hecho significativo, y la relación entre Nani y Lilo también. Los protagonistas son excepcionales, especialmente Lilo. Estamos ante el retrato más estimulante y carismático de un niño en toda la historia del cine de animación. Afortunadamente Disney ha dejado de hacer bebés monos como Tarzán, Hércules y Boo (hacían gracia, pero empezaban a repetirse) para ofrecernos a una niña con un complejo mundo interior que refleja la carencia afectiva de unos padres. El personaje de Lilo es MAGISTRAL, bravo por su animador, Andreas Deja, pocas veces me he reído tanto y me he emocionado con un personaje de dibujos animados. El otro gran personaje es Stitch, con un diseño maravilloso y una animación soberbia. Sin embargo cuando mejor funciona Stitch es cuando interacciona con Lilo, creando un divertido tour de force de gags que sufre con la paciencia del Santo Job Nani. El personaje de Nani llega a dar pena, es una chica optimista pero que se ha llevado algunos palos en su vida, y que además tiene que lidiar con una niña que afirma que sus amigas deben ser castigadas. El resto de personajes resulta bastante más plano. David Kawena tiene poco peso y apenas interviene en la historia. El capitán Gantu y la mujer del consejo galáctico no me convencen ni por diseño ni por personalidad. Jumba tampoco resulta carismático, pero Pleakley me encantó. A pesar de que el diseño no es nada espectacular, su actuación de bicho nervioso (al estilo Zazú) y su parte cómica resulta muy divertida. Cobra Burbujas (poco menos que un Men In Black) no está nada mal como personaje, y también tiene algunos momentos divertidos (el chiste del área 51 es impagable). Los detractores de Disney no podrán acusarles esta vez de maniqueísmo puesto que no hay villano de la función y los personajes buenos se alejan un rato de ser santos. Son personas con sus virtudes, defectos y miserias. El guión en general está bien llevado, aunque el prólogo es algo flojo, el final algo predecible y el clímax algo desmesurado, pero las mejores escenas son las de Nani, Lilo y Stitch. La música de la peli se diferencia en 3 partes: el score de Alan Silvestri, con su solvencia habitual, las canciones de Elvis, que encajan perfectamente en la narración y los coros Hawaianos, muy muy bonitos y que dan el punto exótico. La canción de Café Quijano no queda mal como final de la peli, con esas fotos de fondo. La otra gran razón que diferencia a esta película, además de por el personaje de Lilo y por su relación con su hermana y Stich es la dirección artística, a cargo de Ric Sluiter, que también se ocupó de la de Mulan. Es EXQUISITA. El uso del color es maravilloso, la peli adquiere una luminosidad y un ambiente naïf gracias a los fondos pintados a la acuarela en el que se mueven uno personajes diseñados según el estilo de Freddy Moore, un antiguo dibujante de la Disney, recuperando así el característico estilo «O» de las primeras producciones del estudio. El CGI está bien integrado, no tiene texturas y recuerda un poco a Futurama. Lo mejor: Lilo, toda ella.
De todos los cafés del mundo, tuvo que elegir el mío